¿Sabías que un árbol de manzanas solamente da frutos una vez al año? En efecto, el ciclo productivo es anual, sin embargo, se trata de una de las pocas frutas disponible en cualquier temporada.

 

Pero no es tan fácil. Si bien una manzana a temperatura ambiente puede durar entre 60 y 90 días en buenas condiciones, para que dure todo un año es clave conservarlas a cero grados, donde la fruta apenas respira y se guarda el tiempo de una manera casi invisible.

 

A México, por ejemplo, cada año llegan 14,000 cajas de manzanas provenientes de Washington. Este viaje, de seis días, implica un compromiso bien puntual: conservar la cadena de frío. Los productores conservan la cosecha en sus propias cámaras. Con el paso de los meses despachan los pedidos a cualquier parte del mundo.

 

“La única forma de vender una manzana de primera calidad en la Central de Abasto de la Ciudad de México es conservar la cadena de frío en todo momento. Allá en Washington, con el flete y, por supuesto aquí en el punto de venta”, señaló Elías Chávez, director comercial de Grupo MLA, el principal importador de manzanas en México.

 

“Nuestros proveedores de transporte saben que sus operadores no pueden abrir la caja en ningún momento. De hecho tenemos que cumplir trámites aduanales para evitar que el producto sea expuesto en toda la cadena. No es fácil transportar manzanas: se requiere un expertise y, sobre todo, la consciencia de que si les da más calor se mueren”, agregó.

 

Previo a su consumo, hay comerciantes que llegan a la Central de Abasto y compran cajas de manzanas dos veces por semana. Las llevan en cajas secas y las mezclan con otros tipos de frutas.

 

“Solo porque de ahí ya llegan a las familias mexicanas, pero de no ser así sería lo peor que le puedes hacer a una manzana: mezclarla con otras frutas y tener arriba de cero grados”, agrega el especialista.