La cadena de frío no podría concebirse sin los equipos de refrigeración, fundamentales para mantener la inocuidad de un gran número de productos en distintas industrias.

Leer: ¿Cómo se enfrenta el COVID-19 en la cadena de frío?

En tiempos de crisis o estabilidad, las empresas de autotransporte que participen en la distribución de mercancías que requieran refrigeración pueden ahorrar energía y costos con los equipos adecuados para su operación. 

De acuerdo con Pedro González, Gerente de Servicios de Carrier Transicold México, se puede hablar de eficiencia energética en las unidades de refrigeración al cuidar su diseño en aspectos como que la transferencia de calor sea la más eficiente posible, cuenten con motores eléctricos y sean más compactas. 

Carrier Transicold México comparte que el grupo ofrece al mercado unidades de refrigeración con motores más limpios y menor consumo de energía. 

Todo esto nos ayuda a utilizar menos combustible, y con ello, se ahorra energía. Somos mucho más eficientes, eléctricamente y en diesel”, afirmó. 

Carrier Transicold México explica que sus intercambiadores para la transferencia de calor ahora son hasta 50% más eficientes. Anteriormente, las unidades contaban con unos mucho más grandes, más pesados, lo que hacía más complicada la transferencia de calor. 

“Tomar un paso de un intercambiador de tubos, contra uno de placas, hace que la unidad sea más eficiente, que la energía que se requiere para hacer ese intercambio sea menor”, detalló.  

Leer: Carrier Transicold presenta tres modelos de la serie Supra

Adicionalmente, Carrier cuenta con intercambiadores de calor llamados multicanal, que reemplazan al condensador estándar y de menor peso, lo que beneficia al tractocamión, que requiere de menor esfuerzo para cargar la unidad de refrigeración.

Carrier Transicold también utiliza motores eléctricos en sus equipos de refrigeración que ayudan a reducir el ruido, en comparación con componentes mecánicos, y son más eficientes trabajando con la parte de enfriamiento del condensador. 

La electrónica es también importante en los equipos de refrigeración para mantener la temperatura. 

“Si comparamos cómo trabaja una parte mecánica, le lleva cierto tiempo llegar a una regulación. Si quiero mantener cierta temperatura, las válvulas le llevan cierto tiempo para equilibrar la temperatura porque son mecánicas, contra la parte electrónica, que es instantánea, se ajusta en el momento que recibe los datos e inmediatamente le da la posición a la válvula, cuánto refrigerante debe circular, qué presiones manejar y mantener la estabilidad”, indicó.

Entonces, la electrónica es precisión en el control de temperatura y reducción en el consumo de energía porque no hay variaciones. El punto que sea seleccionado, la unidad la va a buscar al momento con los datos de los sensores y siendo muy estable.

Finalmente, las transmisiones, en lugar de ser muy largas y que requieran muchas bandas, se requiere reducirlas y hacerlas más eficientes en toda la parte de la transmisión de potencia. 

En Carrier Transicold, las nuevas unidades son más compactas, permiten que una sola banda dé toda la transferencia, que sea corta, que sea la potencia de una sola banda, y esto ayuda aumentar la eficiencia en la transmisión. 

“Todas estas acciones se han implementado en las unidades de refrigeración y nos han ayudado a tener motores más limpios y a consumir menores cantidades de energía por consumo de diesel o eléctrico”, afirmó.

Leer: ¿Qué requiere la cadena de frío de las flotas?