Luego de que las autoridades se percataron de que algunos vehículos con doble remolque que ya portaban su Autorización Expresa, no cumplían con lo necesario para tener este engomado, decidieron lanzar un nuevo procedimiento que implica la verificación presencial de condiciones físico-mecánicas. Se trata, dijo Salvador Saavedra, de un caso en el que pagan justos por pecadores.
Y es que recientemente, a través de la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (CONAMER), la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) publicó el proyecto que define el procedimiento y requisitos para obtener la nueva Autorización Expresa.
Sobre el tema, el experto en esta materia recordó que para obtener la primera versión de la Autorización Expresa, el transportista declaraba de forma documental que cumplía con los requerimientos establecidos en la NOM-012; así, presentaba algunos documentos que le sirvieran de comprobación como la constancia de cumplimiento de la NOM-035 –en el caso de los remolques– o la factura de vehículos motrices.
“Y con eso simplemente ya la autoridad emitía los permisos. Ahora, al hacer verificaciones en campo, la autoridad se dio cuenta que algunos vehículos que no cumplían con lo que documentalmente decían”, dijo en entrevista para TyT.
El también Presidente del Ramo 105 del Sector de la Industria Automotriz de la CANACINTRA, comentó la mayoría de los permisionarios sí cumplieron con las características señaladas en la NOM-012, una vez entrado en vigor el nuevo procedimiento, tendrán que sacar su cita con la SCT, seguir el proceso burocrático, sacar una cita con la Unidad de Verificación para la revisión presencial de condiciones físico-mecánicas y esperar el dictamen de la inspección para poder obtener el nuevo engomado, el cual ahora es color guinda.
“En la parte burocrática lo complicaron y todo por causa de algunos que, por decirlo amablemente, hicieron trampa en la forma en que lo solicitaron en la Autorización Expresa anterior”, puntualizó.
Salvador Saavedra agregó que el proyecto que la SCT presentó implica la verificación a unidades con exactamente las mismas especificaciones que en la primera Autorización Expresa.
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Además, consideró que, considerando que las Unidades de Verificación solventan la revisión en apego a la NOM-068 de todo el parque vehicular del autotransporte, bien podrían cumplir con esta nueva asignación, toda vez que han demostrado la capacidad técnica.
En este sentido, destacó que los 180 días naturales (seis meses) que el proyecto propone para cumplir con obligación de portar la nueva Autorización Expresa, es un tiempo razonable. Todo está, precisó, en que la propia SCT cree un pre-registro ágil y dé dictamen final a los transportistas de forma oportuna.
“Esperamos que hagan bien las cosas. Nos conviene a todos los que transitamos en carretera, que esos vehículos cuenten con los dispositivos de seguridad que marca la NOM-012”, expresó.
Finalmente recordó que aún hay pendientes para la completa aplicación de la NOM-012, como la revisión de la norma de remolques (NOM-035), la publicación de los lineamientos para los GPS y el emplacamiento de dollies.
