La electrificación de las 4.2 millones de vanes y step vans que se estiman en Estados Unidos (EU) y Canadá ahorraría casi 5,000 millones de galones de combustible al año –equivalente a 18,927 litros– y evitaría 43.5 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año, concluyó el Run on Less Electric del Consejo Norteamericano para la Eficiencia de la Carga (NACFE, por su siglas en inglés).
Las pruebas realizadas en el marco del Run on Less Electric incluyó tres pares flota y fabricantes del segmento de vehículos comerciales ligeros: DHL con una van Lightning eMotors Ford Transit 350 HD Clase 3; Purolator con una step van de Motiv EPIC Clase 6, y Servall Electric con vehículo Workhorse C1000 Clase 4.
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NACFE señaló que, en conjunto, los ciclos de trabajo y los casos de uso aplicados en Run on Less Electric son muy representativos de este segmento de mercado; por lo que concluyó que los requisitos operativos de las recolecciones y entregas de paquetes se alinean bien con el punto óptimo de la tecnología que ofrecen las baterías actualmente.
Y si bien hay algunos tipos de carga que pueden agregar complejidad, como la refrigeración, el desafío es manejable. Por ello, y considerando estos aspectos, NACFE concluyó que este segmento es 100% electrificable en Norteamérica.
Entre otros hallazgos del estudio se encuentra que todo lo relacionado con la electrificación de vanes y step vans es más fácil y el costo total de propiedad (TCO, por sus siglas en inglés) para este segmento se acerca a la paridad con las versiones a diesel y gasolina.
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Actualmente, la tecnología de baterías cumple con los requisitos operativos de los vehículos comerciales más pequeños, especialmente en el rango de Clase 3 a 6. Los paquetes de baterías son más pequeños y no afectan la capacidad de carga ni la carga útil. Además, debido a que estas unidades generalmente se usan en operaciones de un solo turno, no es necesaria la carga rápida. Esto reduce los requisitos de energía, disminuyendo el costo total de carga e infraestructura.
Además, el Run on Less Electric encontró que estas tecnologías mejoran la atracción y retención de los conductores, debido a su facilidad de operación, confiabilidad y la mejora del entorno de trabajo.
NACFE reconoce que aunque electrificar vehículos comerciales ligeros es más fácil, la transición seguirá siendo difícil, pues ésta no ocurrirá de la noche a la mañana: “Rediseñar estacionamientos y depósitos para apoyar la electrificación requerirá tiempo, esfuerzo y dinero. La planificación cuidadosa durante la fase de diseño en nuevos sitios puede ayudar a las flotas a mitigar algunos de los desafíos que experimentarán los sitios existentes a medida que trabajan hacia la electrificación”, compartió.
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“Hace tan solo cinco años, habría cuestionado la viabilidad de electrificar las flotas de vanes y step vans de Norteamérica”, dijo Mike Roeth, CEO de NACFE. “La transición a la paridad de costos sucedió más rápido de lo que la mayoría de nosotros esperábamos, y estoy tan sorprendido como muchos de anunciar hoy que el mercado eléctrico ha llegado”.
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