Con el avance de la pandemia por COVID-19, lo digital se convirtió de golpe en el centro de la interacción con clientes y consumidores. Esto es reconocido por la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), que ha puesto en marcha una estrategia para impulsar la venta de vehículos mediante el digital engagement.

En colaboración con Jato Dynamics México, pondrá a disposición de 3 mil establecimientos de distribuidores asociados la aplicación FLEX MX, una herramienta enfocada en realizar la venta digital de automóviles. 

A través de FLEX MX, la fuerza comercial de los distribuidores tendrá acceso para conocer y comparar las especificaciones de los vehículos disponibles en el mercado mexicano, la oferta comercial (incentivos) y un cálculo del costo total de propiedad.

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FLEX MX tiene la información disponible de al menos 2 mil versiones de compra que se comercializan en el país para que los vendedores ofrezcan servicio digital a los clientes desde el smartphone, tablet o computadora.

De acuerdo con Gerardo San Román, director para América Latina de Jato, la plataforma ya ha sido utilizada por poco más de 10 grupos de distribuidores en el país–como Montoto, Agua Azul, Andrade– en algunos de sus pisos de ventas. 

La compañía prevé que con FLEX MX los comercializadores vendan por lo menos 10 vehículos más al mes, según su tamaño– para un total de 120 vehículos más al año. Grupo Alden reportó un incremento de 12% en sus ventas con el uso de la plataforma digital. 

Guillermo Rosales, director general de la AMDA, explicó en videoconferencia que el objetivo es que cada una de las distribuidoras tenga acceso a FLEX MX para atenuar el impacto de la crisis económica, que el sector arrastra desde antes de la llegada de COVID-19 y que se ha profundizado con el golpe de la pandemia. 

Necesitamos atender mejor al cliente con información más oportuna, más profesional, más ágil. Aunque se están levantando las restricciones para trabajar en los pisos de venta en un mayor número de entidades, no es suficiente para que los consumidores interesados en adquirir un vehículo se vuelquen a la calle o a visitar a los distribuidores como ocurría antes de la llegada del COVID-19”, explicó.

Añadió que las limitaciones de los consumidores se mantendrán, incluso por decisión propia y pese a la reapertura de nuevas actividades, por lo que es necesario que la AMDA fortalezca su canal digital. 

Indicó que, en un escenario menos grave, la expectativa es que puedan colocar cerca de 920 mil unidades para 2020, y, en caso de que se prolongue la crisis económica, estén arriba de las 700 mil unidades. El uso de FLEX MX podría ayudar a que los comercializadores alcancen la cifra más optimista. 

“La llegada del COVID-19 profundizó la crisis. Y bajo cualquiera de los escenarios (de ventas) estamos hablando de un golpe muy fuerte para el mercado automotor: la crisis más profunda desde 1995. Y dentro de ello ya está incluido la imposibilidad de los consumidores de hacer frente a un compromiso crediticio para comprar un vehículo o la decisión de hacer esta compra ante la incertidumbre del empleo”, expresó Rosales. 

Jato y AMDA apuestan a que FLEX MX dará a la fuerza de ventas de los distribuidores visibilidad de lo que hay en el mercado para ponerla de una manera ordenada e imparcial a fin de ofrecer a los compradores una decisión asesorada y transparente de los vehículos.

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