En los últimos años, hablar de Uptime se ha posicionado como uno de los principales factores para la rentabilidad del autotransporte. Que los vehículos circulen más tiempo y en mejor condiciones son un imperativo, pues la rentabilidad del autotransporte radica en que las unidades estén trabajando.

Y aunque habrá flotas que se vieron tentadas a rodar un poco más sus llantas o alargar sus periodos de drenado e, incluso, ahorrar unos pesos en alguna refacción, el mantenimiento preventivo no es negociable, pues de éste depende que los camiones circulen no solo un viaje, sino pensando en mediano y largo plazo.

Hablando específicamente los retos de contar con las unidades al cien en la nueva realidad, Ramón López González, director general de Mecánica Tek, considera que existen lineamientos muy puntuales que harán la diferencia en este renglón.

  1. Implementar controles y mediciones puntuales del proceso de mantenimiento.
  2. Desarrollar modelos predictivos de mantenimiento.
  3. Aprovechar la tecnología como la telemática en las unidades para un programa de mantenimiento.
  4. Uso e implementación de nuevas tecnologías en relación con regulaciones de emisiones.
  5. Invertir en herramienta y equipo actualizado de taller.
  6. Implementar programas de mantenimiento rigurosos y eficientes.
  7. Desarrollar un control correcto de inventarios de refacciones para evitar gastos innecesarios y crecimiento de stock obsoleto.
  8. Gestión correcta en la administración del mantenimiento en relación con las metas encontradas de otras áreas de la empresa como ventas y distribución.
  9. Capacitación a operadores para reducir los riesgos de problemas de mantenimiento por mal manejo de la unidad.
  10.  Actualización y certificación de los técnicos.
  11.  Definir ciclo adecuado para la renovación vehicular. 
  12.  Prevenir daños operativos a las unidades.

“La eficiencia en mantenimiento se debe ver de forma integral en relación a disponibilidad y gasto y no necesariamente determinar un rubro específico en donde pueda haber más eficiencia, de forma general es sano, ya que esto dependerá fuertemente de la operación del cliente, del tipo de unidades, o de factores ajenos al mantenimiento. 

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La combinación y administración correcta de todos los conceptos en su conjunto dará como resultado una operación de mantenimiento eficiente. El tema de capacitación es sumamente importante y debe ser considerado como una inversión y no un gasto, pero visto de manera aislada no funciona por sí solo. Un técnico capacitado, pero sin herramienta adecuada, sin infraestructura, sin condiciones seguras para operar, o sin las refacciones correctas no rendirá lo esperado”, agregó.