En la XLV Legislatura del Congreso de la Unión que inicia el próximo 1º de septiembre, el partido en el poder se mantiene como la principal fuerza política del país, sin embargo, el retroceso vivido en las urnas derivará en una menor aprobación de reformas ideadas por el Gobierno de la Cuarta Transformación, y con ello, se vislumbra un menor tope a la inversión, a la creación de empleos y al crecimiento económico, sostienen analistas. 

El pasado 15 de junio, el presidente Andrés Manuel López Obrador expuso en conferencia de prensa matutina que planea tres reformas para lo que resta de su administración. La primera, que enviará al Congreso –a más tardar a inicios de 2022– es la reforma eléctrica, con la finalidad de fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y así revertir lo que llamó “un mercado en manos de los particulares” y echar atrás un esquema con tarifas más bajas o subsidiadas para las grandes empresas y costos más elevados para los ciudadanos.  

Leer: Cómo va 2021 para el autotransporte de carga

Su segundo objetivo es una reforma electoral para renovar al Instituto Nacional Electoral (INE), la cual tiene el propósito de generar una mayor participación ciudadana, recortar el gasto destinado a las campañas políticas, al propio Instituto y al Tribunal; a esto se suma su intención de reducir el número de diputados y senadores. Su propuesta tendrá vida el próximo año.

Entre sus reformas planeadas está la dirigida a incorporar la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), y ésta será enviada al Congreso hacia 2023.

Más que reformas, se requiere conciencia

Los planes de reformas anunciados por el presidente llevó al peso a los 20.1937 por dólar en operaciones de mayoreo. Este máximo alcanzado por el tipo de cambio durante la jornada, de acuerdo con Gabriela Siller, directora de Análisis Económico Financiero de Banco BASE, reflejó la percepción de riesgo de los inversionistas sobre la competitividad energética y la estabilidad de futuros procesos democráticos en México. Aquí un ejemplo de la importancia de que en el Congreso haya pluralidad. 

En entrevista para TyT, Siller Pagaza expuso que, en cuanto a la reforma eléctrica y en términos económicos, no termina de entender porqué el Presidente López Obrador quiere darle prioridad a la CFE, cuando no es la opción más barata, y el resultado será un mayor costo para los usuarios finales y una mayor presión sobre las finanzas públicas.

En lo que respecta a las reformas electorales, la analista advirtió que es preocupante que el Ejecutivo federal pretenda reformar el INE, ya que, pese a no tener efectos económicos a corto plazo, sí los tiene a largo plazo, pues la democracia impacta en el sistema económico. 

Con estos antecedentes, y con un reacomodo en el Congreso en el que revive la llamada oposición, la directora de Análisis Económico Financiero de Banco BASE espera que los distintos partidos generen un contrapeso y que, a la hora de negociar, no se guíen por favores para al final terminar sin cambios relevantes que contribuyan a una política económica que beneficie el desarrollo del país.

Consultado por separado, Luis Foncerrada Pascal, asesor económico de la American Chamber of Mexico (AmCham), explica que el hecho de que ya no tengan una mayoría calificada, incide en que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados no puedan modificar la Constitución, pero sí podrán pasar leyes y autorizar presupuesto.

En este sentido, el exdirector general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), sostiene que se debe legislar con la mirada puesta en fomentar la inversión pública y privada, porque solo así se podrán generar los 18 millones de puestos de trabajo que hacían falta en el país hasta el cierre de abril. 

Destaca que Rogelio Ramírez de la O, quien en los próximos días asumirá el cargo de Secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), tiene en la agenda tres temas prioritarios: las finanzas del sector energético y del público, así como la igualdad, a través de la generación de empleos y mejores salarios. 

Estos objetivos, impulsados desde el Gobierno federal, de acuerdo con Foncerrada Pascal, abren la posibilidad de que haya nuevas iniciativas enfocadas en ellos, pero sobre todo, que propicien la inversión.

Si el propósito principal es el bienestar de toda la población, eso solo lo vamos a lograr con mejores empleos y, para eso, tenemos que ser más competitivos. Por lo tanto, todos los partidos, el Congreso, los Gobiernos estatales y el Gobierno federal deberían tener presente que, si queremos mejorar el bienestar de la población, tenemos que ser más competitivos, pero sobre todo, que haya una mayor generación de empleo, y eso se logra con inversión”. 

Morena sigue teniendo mayoría absoluta, no requiere los votos de los otros partidos para modificar leyes; sin embargo, dentro de las comisiones sí habrá mayor participación y oposición, y eso puede permitir que haya un impulso, pero la verdad es que un país, para ser competitivo, debe tener un Gobierno competitivo y un Congreso consciente de la gran importancia de la competitividad”.

Luis Foncerrada Pascal, asesor económico de la AmCham.

La reforma fiscal es uno de los primeros temas de gran trascendencia para la economía que estará en manos del Congreso discutir. Al respecto, Siller Pagaza expuso que se espera una mayor fiscalización para las grandes empresas, pues en 2020 fue un factor efectivo en la recaudación fiscal del Gobierno federal. 

En su turno, Luis Foncerrada evalúa que se estará ante la posibilidad de ofrecer atractivos a la inversión, y ello se conseguirá al permitir deducir el gasto en inversión de manera inmediata: “Eso con una buena fiscalización, para que las empresas no pongan como inversión cosas que no lo son”, aclara. 

“Se dice que habrá mejoras técnicas y simplificación, pero no se ve que haya algo que pueda realmente modificar el ritmo de inversión. Tal vez la parte más importante de la miscelánea o de una reforma fiscal, es que dé certeza jurídica y un respeto total al Estado de derecho”, finaliza el especialista.