Durante de abril, las órdenes de remolques registraron solo 300 unidades en Estados Unidos, llegando a su nivel más bajo desde 1990, reportó FTR Transportation Intelligence.

De acuerdo con la firma, los pedidos de remolques cayeron 95% respecto a las 6,500 de marzo de este año, así como una pérdida del 98%  comparado con los 13,200 de abril de 2019.

Asimismo, FTR revela que los pedidos de remolques de los últimos doce meses suman 162,000 unidades,  55.5% menos que los 364,000 registradas entre mayo y abril de 2018 y 2019, respectivamente.

La firma señala que las severas condiciones de recesión causaron que muchas flotas aplazaran sus pedidos previamente programados para este 2020 y también se resistieron a hacer nuevas órdenes.

A detalle, el segmento de cajas secas se vio particularmente afectado y los pedidos de refrigeradas también sufrieron pérdidas. Por su parte, las órdenes de equipo aliado para servicios especializados se mantuvieron tibias después de caer significativamente en marzo.

Para FTR, las caídas se debe a que numerosas plantas de OEM se cerraron durante parte de abril; algunos por razones de salud, algunos por falta de órdenes y otros por una combinación de ambos.

“Las flotas permanecen en una postura severa de espera hasta que puedan evaluar el daño causado en el mercado de autotransporte de carga por la pandemia. Dado que la recuperación de la crisis económica depende en gran medida del estado de la crisis de salud, existe una gran incertidumbre en el mercado de remolques”, comentó Don Ake, Vicepresidente de Vehículos Comerciales de FTR.

El experto agregó que las comprar de remolques y vehículos automotores parece estar en espera hasta que las flotas puedan ver un camino claro hacia adelante. “Las flotas más grandes reanudarán el reemplazo de los remolques viejos tan pronto como vean que se levantan las restricciones económicas y que la carga vuelve a crecer”, puntualizó Ake.

“El elemento clave para la recuperación del mercado de remolques es mejorar la confianza de la flota. Los transportistas vieron que la carga se suavizó a principios de año y luego se derrumbó debido a la recesión causada por COVID-19. Todavía hay demasiadas incertidumbres presentes para que las empresas compren cajas nuevas en grandes cantidades”, agregó.

Don Ake,  señaló que los pedidos deberían mejorar pronto, pero se espera que sigan siendo modestos durante los próximos meses.

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