El gobernador Silvano Aureoles Conejo supervisó las acciones que se realizan en el filtro sanitario de la Tenencia de Riva Palacio, en la frontera con Guerrero, como parte del reforzamiento para detectar posibles casos de COVID-19 en los límites estatales.

El mandatario explicó que está recorriendo los filtros sanitarios carreteros para dar información precisa a quienes viajan en autobús, vehículos de carga o particulares, sobre la importancia de atender todas las recomendaciones de las autoridades de salud.

Las acciones incluyen la cooperación con la Policía de la entidad, la Guardia Nacional, el Ejército y la Marina Armada de México, con un desligue de 632 elementos de seguridad.

De hecho, como parte de las labores de vigilancia, Aureoles Conejo entregó personalmente información sobre las medidas preventivas a quienes circulaban en el puesto de control ubicado en esta zona limítrofe con el estado de Guerrero, de un total de 13 que operan en los límites con los seis estados vecinos.

Entre las medidas, recalcó, están el uso de cubrebocas obligatorio, lavarse las manos de manera continua y no saludarse de mano, beso o abrazo, así como proteger de manera especial a adultos mayores.

El mandatario michoacano recordó que la enfermedad es muy contagiosa y se propaga con facilidad, ya que una persona que contraiga el padecimiento y que no siga las medidas sanitarias correspondientes, puede llegar a contagiar a 60,000 personas más.

“Por eso la importancia de acatar las medidas y evitar que el número de personas fallecidas se incremente en el estado, ya que viene la etapa más complicada del COVID-19”, señaló el gobernador michoacano.

La vigilancia sanitaria en carreteras de esta entidad se suma a las medidas que han implementado otros estados como Tabasco, Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas, Nuevo León y Zacatecas.

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