Las medidas sanitarias impuestas en la ciudad de Shenzhen, al sureste de China, ante la acelerada propagación de Ómicron, incrementarán los costos del autotransporte de carga y afectarán sus tiempos de entrega en la zona, estimó Maersk.
En la actualización sobre la operación logística de los principales puertos y ciudades de China, Maersk previó que 40% del servicio de autotransporte entre Shenzhen y las ciudades cercanas se verá afectado debido al control estricto de las carreteras.
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Añadió que las frecuentes pruebas de ácido nucleico (NAT) solicitadas a los operadores derivarán en tiempos de entrega más largos y un posible aumento en los costos de transporte, como la tarifa de desvío y la tarifa de autopista.
El servicio de camiones, por ahora, todavía está disponible en los principales puertos de China y en las ciudades cercanas, siempre que los conductores tengan un informe negativo de NAT solicitado por los gobiernos locales, informó.
Para el caso del transporte marítimo, Maersk visualiza que el tiempo de espera de los buques aumentará en los puertos de Yantian y Chiwan.
Añadió que en Shanghái, la ciudad más grande de China, los agentes aduanales trabajarán como de costumbre. Sin embargo, la operación in situ de la aduana para la declaración de carga estará cerrada desde el 16 de marzo hasta nuevo aviso.
En este caso, Maersk previó que habrá un impacto limitado, ya que la mayoría de las declaraciones aduaneras se realizan sin papel.
En esa misma ciudad de China, en los almacenes también se solicita a los operadores que muestren el código de salud para la entrega de la carga, para el caso de los trabajadores de riesgo medio-alto deben mostrar, el informe NAT debe estar dentro de las últimas 48 horas.
Maersk detalló que debido a la suspensión del servicio de autotransporte entre Hong Kong y China continental, se toma el servicio de barcazas como alternativa para el movimiento de carga.
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La reserva de espacio de carga aérea no se efectuará hasta que la carga se entregue en el almacén del aeropuerto de Hong Kong.
Como consecuencia, llevará un tiempo de entrega más largo de lo habitual para el servicio de carga aérea en esa importante región autónoma, al sureste de China. Esto como consecuencia de las medidas dictadas por las autoridades para limitar la propagación de la COVID–19.
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