Después de tocar en 2018 un máximo histórico de robo de vehículos pesados asegurados, esta práctica delictiva tomó un respiro el año pasado, con un reporte de 10,750 unidades o una baja anual de 7.6 por ciento, de acuerdo con información de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros  (AMIS).

Andrés Manuel López obrador arrancó su primer año de gobierno con 885 casos menos de vehículos pesados robados, que contaban con un seguro en 2019 respecto a 2018. Sin embargo, la suma de  los reportes de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Fiscalía General de la República (FGR) arrojaron un incremento de 14% de los ilícitos cometidos en contra del transporte de carga el año pasado.

Esta baja registrada por el sector asegurador, en el caso específico de unidades pesadas, tiene entre sus factores la coordinación entre los empresarios y el gabinete de seguridad del Gobierno actual, que han derivado en operativos como Carreteras Seguras y la prohibición del uso de los jammers.

“La Marina y el Ejército son quienes  más ayudan a la recuperación de vehículos robados asegurados. Hay evidencia que  la coordinación existente entre las autoridades de seguridad y el sector privado está siendo muy positiva”,

expuso Recaredo Arias, director general de AMIS.

A estos esfuerzos, a la baja reportada para unidades pesadas y los vehículos ligeros en general, cuyo robo de los asegurados descendió 11% anual en 2019, se debió a que “estadísticamente, los fenómenos delictivos  tienen un tope y por razón natural hay un descenso. A esto se suma que los últimos días de cada gobierno, salvo el último de Felipe Calderón, hay un incremento en ilícito”, dijo.

Baja drástica en los robos de autobuses

Al interior del reporte de vehículos pesados asegurados robados en 2019, el ilícito cayó en 46% para el caso de la autobuses, al pasar de 140 reportes en 2018 a 75 el año pasado, según los reportes de la AMIS. 

Los camiones robados que contaban con una póliza se redujeron en 9% anual, al pasar de 2,228 unidades en 2018 a 2,028 al cierre del año pasado; en el caso de los semirremolques el descenso fue de 8.9% para sumar 3,634 unidades en 2019; el robo de tractocamiones pasó de 5,136 reportes en 2018 a 5,000 al cierre de diciembre, es decir, un descenso de 2.6 por ciento.

Carlos Jiménez, titular del segmento de Autos dentro de AMIS, detalló que  la recuperación de equipo pesado se ubica entre 30% y 35 por ciento, con sus mejoras en semirremolques y tractocamiones, en los que la recuperación llega a ser de 40 por ciento. 

Entrevistado por TyT, expuso que esta baja recuperación se debe, principalmente, a que  los vehículos pesados robados son utilizados por los delincuentes para trasladar mercancías robadas en otros sitios. Este caso, añadió, es común en Querétaro, donde son usados para transportar los productos sustraídos de los ferrocarriles. 

A la baja recuperación se suma, dijo, la rapidez con que son desvalijados los camiones de carga, pues cada vez están dotados de mayor tecnología, atractiva en el mercado negro, y ello es aprovechado por los delincuentes. 

Entre 2014 y 2019, el robo de vehículos pesados asegurados incrementó 80.9%, añadió la AMIS.