La industria de pesados a nivel global enfrenta una desincronización de las cadenas de suministro, lo cual genera que el denominado just in time no se esté cumpliendo y se tengan retrasos en las entregas de unidades, advirtió Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT). 

La industria enfrenta retos, le diría yo una desincronización de las cadenas de suministro a nivel global, es decir, la fabricación de algunos componentes de la industria no se encuentra totalmente en sincronía. 

Lo que conocemos como just in time caracteriza o caracterizó por muchos años a la industria automotriz a nivel global no se está cumpliendo, entonces ha generado retrasos en la entrega de productos terminados”. 

Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de ANPACT.

En conferencia de prensa mensual, el líder de ANPACT expuso que además de la escasez mundial de semiconductores, los productores se enfrentan a la falta de distintos componentes que detienen las entregas, cuando son esenciales.

Los asociados de ANPACT han hecho hasta lo imposible por sincronizar el abasto de semiconductores, pero al mismo tiempo nos topamos con (la falta de) otro tipo de productos que van desde elevadores de los vidrios, algunas partes de plásticos o piel de los de los paneles dentro de la cabina o desde el radio”. 

Añadió que la desincronización de la cadena de proveeduría enfrenta riesgos adicionales, como los cierres de fábricas en China –proveedoras de los distintos Tier de la industria de vehículos pesados–, la interrupción de operaciones en el Puerto de Shanghái y la guerra entre Rusia y Ucrania. 

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Elizalde Lizáraga reconoció que estas disrupciones son factores que afectan la producción y exportación de vehículos pesados, en un proceso de recuperación. 

En este contexto, dijo, que los asociados de ANPACT mantienen sus esfuerzos para alcanzar la plena reactivación en un entorno que tiene su propia complejidad en México debido a la inseguridad, la falta de operadores, la elevada inflación, el cumplimiento del complemento Carta Porte y la sobrerregulación del autotransporte. 

En el tema del complemento Carta Porte, detalló que la complejidad está en las operaciones de comercio exterior, situación que confían se solucione en los próximos meses mientras se mantiene el periodo de prueba, por parte del Servicio de Administración Tributaria (SAT). 

Elizalde Lizarraga reiteró su estimado de que el abasto de semiconductores comenzará a regularizarse a partir de la segunda mitad de este año y en algunos casos de armadoras, hacia 2023. 

En cambio, recordó que hay más afectaciones en la logística y otros componentes, cuya solución es impredecible, como es el conflicto entre Ucrania y Rusia, que está afectando la producción y distribución de gases inertes, utilizados en la cadena de suministro de la industria automotriz. 

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En abril pasado, las ventas al mayoreo de vehículos pesados totalizó 3,370 unidades, 46.5% más que en igual mes de 2021; la producción de unidades de carga y pasaje fue de 15,358 equipos, un alza anual de 20.3%; mientras que las exportaciones se elevaron 14.7% a 12,183 vehículos. 

Sobre estos incrementos a doble dígito de la industria de pesados, el Presidente de ANPACT evaluó que es temprano para pensar en el inicio de la recuperación permanente, aunque sí se observan mejores resultados a los esperados.

Al cierre de 2021, la industria de pesados establecida en México estimó la venta al mayoreo de 31,881 unidades, cifra que prevé ajustar al alza en los próximos meses. 

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