La reducción de la movilidad y el paro forzado de las actividades económicas no esenciales derivaron en una baja de entre 30% y 40% en el número de siniestros reportados por las aseguradoras de vehículos ligeros y de carga en el país, expuso Mario Alberto Villa, subdirector de Prevención de Riesgos de Quálitas. 

Las aseguradoras vimos una disminución, de entre 30% y 40% en la frecuencia, en el número de siniestros que reportaban a las compañías de seguros, y sigue esa tendencia”.

Mario Alberto Villa, subdirector de Prevención de Riesgos de Quálitas.

Durante su exposición en la ponencia “Panorama de la administración de riesgo en México” en el Cuarto Foro 2020 de la Asociación Mexicana de Arrendadoras de Vehículos (AMAVe), el experto expuso que ese comportamiento continuará, mientras no regrese la antigua normalidad. 

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Detalló que disminuyó la frecuencia de la siniestralidad, pero no fue así para la severidad de los percances. Esto, debido a que con las restricciones a la movilidad, las carreteras lucieron vacías y los conductores excedían la velocidad, factor que derivó en accidentes más fuertes.

A las empresas de transportes les decíamos que deben ser cuidadosos con los accidentes, porque hoy mandar a un lesionado a un hospital con una fractura lo pone en mayor riesgo, entonces teníamos que bajar la frecuencia”. 

Mario Alberto Villa, subdirector de Prevención de Riesgos de Quálitas.

El Subdirector de Prevención de Riesgos de Quálitas compartió que la probabilidad de contagio por SARS-CoV-2 se convirtió en un factor de riesgo dentro de los asegurados transportistas. 

Explicó que el miedo de los operadores a contagiarse del virus —en especial entre mayo y junio, cuando se vivió una fuerte etapa de confinamiento y trabajo desde casa—  provocó un problema serio entre los transportistas, pues los operadores no querían hacer viajes, en especial hacia las ciudades de alto riesgo, como la Ciudad de México. 

Se agudizó el problema de los conductores, sobre todo cuando tenían que hacer viajes largos, recordemos que se cerraron los lugares donde comer, bañarse, donde pernoctar, fue un problema muy serio”. 

Mario Alberto Villa, subdirector de Prevención de Riesgos de Quálitas.

Refirió que la situación ha mejorado, en línea con la reducción de casos de COVID-19 en el país; sin embargo, la recomendación de Quálitas a sus asegurados es no bajar la guardia, para evitar poner en riesgo a sus operadores. 

El especialista impartió una charla para guiar a las empresas que tienen flotillas a reducir su siniestralidad, con el desarrollo de una estrategia que las lleve a crear un mapa de riesgo dentro de su estructura, para detectar, corregir y dar seguimiento a aquellos factores que están generando mayores gastos, pérdida de clientes y ponen en riesgo a sus operadores. 

Para el experto, las empresas que priorizan un enfoque humanista, o aquel dirigido a la salud e integridad del operador, obtendrán mejores resultados en la reducción de su siniestralidad; en comparación de quienes ponderan el enfoque mecanista, uso de tecnología y uso de sistemas para reducir los errores humanos. 

En este contexto, instó a las empresas transportistas a ser sensibles y cuidar a sus operadores, ya que nadie quiere a conductores enfermos o en alto riesgo por COVID-19, en un mercado laboral con deficitario, compartió.