Solo nueve estados del país ofrecen una disponibilidad total de diesel Ultra Bajo Azufre (UBA), mientras que a nivel nacional la cobertura ha decrecido en los últimos tres años, reveló un estudio liderado por la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) y la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Baja California, la Ciudad de México, Campeche, Chiapas, Jalisco, Quintana Roo, Tabasco, Tlaxcala y Yucatán son las entidades que a inicios de 2021 contaban con un abasto total de diesel de menos de 16 partes por millón (ppm) de azufre.
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El estudio en el que colaboraron participantes en la cadena de valor del autotransporte de carga y pasaje expuso que la disponibilidad del diesel UBA en México pasó de un máximo de 81% en 2018 a 72.6% en el presente año.
Los estados con una menor disponibilidad de diesel limpio son Guerrero y Baja California Sur, con cero por ciento; seguidos por Nayarit y Morelos, con 16.7% cada uno; así como Durango, con 37.5 por ciento.
A esta lista se suman San Luis Potosí, con una disponibilidad de 20 por ciento; Michoacán, con 37.5 por ciento; Querétaro y Aguascalientes, con 50 por ciento, cada una.
Es decir, entidades del Bajío –con gran movimiento de carga y pasaje por su nivel de industrialización– cuya disponibilidad de diesel UBA, en el mejor de los casos, no supera el 50 por ciento.
Durante la presentación del estudio realizado entre febrero y mayo de este año, Guillermo Rosales, director general adjunto de la AMDA, expuso que la ubicación de diesel UBA está relacionada con la infraestructura del sistema de distribución del combustible, y no por las necesidades de los transportistas.
Ante este retroceso en la disponibilidad del combustible, las cámaras, confederaciones y asociaciones que forman parte de la cadena de valor del autotransporte se unieron para solicitar a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) el ajuste de la NOM-044.
Esta Norma a cargo de la Semarnat obliga a la industria de vehículos pesados establecida en México a solo importar y producir unidades de tecnologías Euro VI y EPA 10 o superiores, y la solicitud fue modificarla para que entre en vigor el 1 de enero de 2025 y no en 2022.
Esta demanda va en línea con la prórroga que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) otorgó a Petróleos Mexicanos (Pemex) en enero de 2020, para que cumpla hasta 2025 con la NOM-016, que lo obliga a distribuir y comercializar DUBA en todo el país.
Durante la conferencia ofrecida este lunes, Enrique González, presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), lamentó que las autoridades federales argumenten que no es necesaria la disponibilidad total de diesel UBA en México.
El líder del autotransporte de carga en el país sostuvo que al no existir una total cobertura, se crea un cuello de botella en aquellas zonas con mayor abasto, además, los transportistas se verían forzados a sobreutilizar las unidades pesadas que funcionan con diesel regular, para garantizar su operación en aquellas rutas con desabasto del diesel más limpio que demandan los motores más modernos –Euro VI y EPA 10 o superiores como dicta la NOM-044–.
González Muñoz añadió que el diesel UBA tiene un precio superior al regular, y esa será una inversión que transportistas de México están dispuestos a realizar en beneficio del cuidado al medio ambiente; sin embargo, no utilizar el combustible adecuado en las nuevas tecnologías puede derivar en la pérdida del motor.
En representación de la Confederación Nacional de Transportes Mexicanos (Conatram), Salomón Dip pidió certeza en la NOM-044 para que las empresas de su sector puedan continuar con sus planes de renovación de flota, con el uso de tecnología más moderna, pero con la garantía de que contarán con el abasto de diesel limpio.
En su turno, José Jiménez Jaime, gerente general de la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), aseveró que sin la disponibilidad total de diesel más limpio será imposible cumplir con la NOM-044, pues la oferta de diesel UBA en algunas estaciones no es garantía de que puedan ofrecer su servicio de una forma adecuada.
Existe el riesgo, dijo, de que las unidades se queden en carretera, con pasajeros e incumplan con la expectativa de sus clientes. “Lo hemos expresado con las autoridades, no es un tema de falta de voluntad, es un tema de falta de condiciones”, sostuvo.
El estudio también reveló que el 90% de las estaciones de abasto no cuentan con la señalética oficial de diesel UBA, lo cual se convierte en un problema para los transportistas de carga y pasaje.
Al respecto, Nicolas Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), expuso que el transporte de pasaje urbano también enfrenta dificultades, incluso en la Ciudad de México, para localizar las estaciones de abasto con el diesel tipo UBA.
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El empresario fue más allá y observó que adicional a la necesidad de alinear la NOM-044 con la NOM-016, se deben crear normas integrales que vigilen el correcto abasto del diesel UBA.
Adicional, Miguel Elizalde, presidente de la ANPACT, aseveró que no modificar la NOM-044 equivale a interrumpir la reducción de emisiones con esta tecnología: “Si no hay coordinación de decisión por Semarnat habrá más contaminación, pierde México, pierde el autotransporte, pierde la cadena de valor del autotransporte porque vamos a tener más emisiones contaminantes que es totalmente contrario al objetivo de la norma”.
