El 2021 no fue un buen año para Toyota Motor Corporation, ante los efectos de la propagación de COVID-19 que afectó principalmente el suministro de semiconductores, piezas clave para la industria, la empresa nipona cerró el año con la caída de sus ventas globales.
De acuerdo con el último informe de la armadora, durante diciembre se registró el cuarto mes consecutivo en la disminución de sus ventas a nivel mundial, con 851,241 vehículos vendidos.
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En tanto, sus cifras de producción vieron el primer aumento en cinco meses, a nivel mundial, con 947,992 vehículos, de los cuales 358,243 fueron producidos en Japón y 589,749 fuera del país.
Respecto a las exportaciones, la empresa registró el primer incremento en 2 años, con una cifra total de un millón 823,468 unidades exportadas.
Desde inicios de 2022, la empresa nipona ha tenido que ajustar sus planes de producción en plantas nacionales, debido a la escasez de suministros ocasionada por los cierres de industrias por la rápida propagación de COVID.
Debido a ello, Toyota a señalado que al momento las perspectivas tanto para COVID como para suministros de piezas siguen siendo inciertas, por lo que se encuentra trabajando de manera coordinada con sus proveedores para minimizar el impacto.
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Asimismo, mencionó la posibilidad de considerar el uso de sustitutos de semiconductores en previsión a la continua escasez de los mismo.
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