En 2020, la Asociación Nacional de Empresas de Rastreo y Protección Vehicular (ANERPV) denunció que, aunado al robo a vehículos de carga en carreteras del país, un lastre que provoca severos problemas a los transportistas que se ven involucrados en estos hechos son la operación irregular y cobros excesivos de los servicios de grúa y corralones.
Se trata de un fenómeno que, de acuerdo con Víctor Manuel Presichi, Presidente de la agrupación, es una situación que incide en que el afectado evite abrir una carpeta de investigación o ratificar la denuncia que presentó.
“Eso genera que sí tengamos una cifra negra en cuestión de robo al transporte y distribución, precisamente cuando las condiciones de recuperación son rápidas, se tiene tecnología GPS y se logra una reacción muy pronta por parte de las autoridades”, comparte en entrevista para TyT.
En materia de incidencia delictiva, estos hechos impactan en el número de eventos reportados. Se trata, dijo, de aproximadamente un tercio de los robos en los que no se sigue todo el proceso y protocolo establecido y que la misma ANERPV recomienda.
“El afectado dice: ‘aquí está mi camión, lo que quiero es seguir trabajando’; entonces, eso genera y promueve actos de posible corrupción, de gratificaciones extraoficiales a las autoridades que pudieron haber apoyado en la recuperación del vehículo, todo con tal de que la unidad no sea remitida a un corralón”, explica.
De ahí la importancia del trabajo conjunto de la ANERPV con las autoridades, no solo para compartir la estadística generada por sus 49 asociados, sino detectar los hechos que están más allá de la estadística concentrada por Fiscalías y Ministerios.
“No es únicamente la recuperación de los vehículos robados, eso solamente es parte del objetivo, el verdadero fin es poder desmembrar las bandas dedicadas al robo de autotransporte y presentar presuntos responsables ante la autoridad y que éstos puedan ser declarados culpables, que lleven un juicio y cumplan con una sentencia, esa es la manera más efectiva de reducir el robo, que se acabe la impunidad”, declara.
Víctor Presichi comenta que cuando se tiene a delincuentes cumpliendo condenas, en automático se “sacan de circulación” a los malhechores y, al mismo tiempo, se lanza un mensaje disuasivo para los que están participando o tienen la intención de hacerlo.
Logros de 2020
Para el líder de la ANERPV, terminar con la impunidad es el objetivo de las sinergias entre autoridades y esta agrupación. De hecho, es también uno de los éxitos del año pasado, en el que, de acuerdo a sus datos, el robo a vehículos con tecnología de geolocalización descendió 25% frente a 2019.
“En esta reducción, no solamente se debe a una disminución de la movilidad, sino a acciones emprendidas por parte de la autoridad, en particular desde la oficina del Subsecretario de Seguridad Ricardo Mejía, así como proyectos con los Gobiernos estatales donde hay mayor incidencia de robo como el Estado de México, Puebla, Guanajuato, Jalisco y Veracruz”.
Además, la Guardia Nacional, que arrancó operaciones en 2019, logró en 2020 una mejor estructuración y organización, lo que ha permitido tener una mejor reacción, patrullaje y labor investigación, tarea en la que ANERPV tiene una participación activa, toda vez que proporciona datos, posiciones geográficas, horarios y modus operandi detectados desde su trinchera.
“Es información que se convierte en materia prima para la labor de investigación para trabajar la detección de estas bandas delictivas. La reacción nunca va a ser suficiente, no va a haber capacidad tampoco elementos, patrullas, ni dinero suficiente para apostarle 100% a la reacción. Tiene que haber labor de inteligencia, análisis, investigación, para poder determinar, encontrar y detener a estas bandas que se están dedicando al robo de transporte de carga”, precisa.
