La inflación general de México se ubicó en 7.07% a tasa anual en enero, en un menor nivel respecto al 7.36% en que cerró 2021, en cambio persisten las presiones, refieren datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). 

El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se mantiene arriba de 7% a tasa anual, por tercer mes consecutivo, presionado por la inflación subyacente así como por precios de los productos agropecuarios y los energéticos.

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El mes pasado, la inflación subyacente –aquella que elimina a los productos de mayor volatilidad– incrementó 6.21% anual, su mayor ritmo desde septiembre de 2001, cuando fue de 6.4%, de acuerdo con el histórico del Inegi. 

Este indicador, que refiere la tendencia de la inflación general a largo plazo, es presionado por las constantes alzas de sus componentes. 

Los precios de las mercancías crecieron a un ritmo de 7.86% y los de los servicios, 4.35%, en enero frente a igual mes de 2021, la mayor alza para ambos desde que hay registro en el INPC.

La inflación no subyacente se desaceleró a 9.68% anual desde un ritmo de 11.74% marcado en diciembre pasado; en cambio, en enero de 2021 su nivel era de 2.63%, refieren datos del Inegi. 

Los precios de los productos agropecuarios avanzaron 15.32% anual en enero, desde el 15.78% mostrado al cierre de 2021; un año antes su ritmo de crecimiento fue de 2.64%.

Los precios de los energéticos y tarifas autorizadas por el Gobierno avanzaron 5.56% a tasa anual en enero, a menor velocidad que el incremento de 8.68% mostrado en diciembre pasado, sin embargo, a mayor velocidad que el incremento de 2.62 visto en enero del año pasado. 

Precios de alimentos y gasolinas presionan la inflación 

En su variación mensual, la inflación general de México creció a un ritmo de 0.59%, a mayor rimo que el 0.36% visto en diciembre pasado, presionada por los precios de productos agropecuarios y los energéticos. 

La inflación no subyacente repuntó 0.52% en enero, desde una caída de 0.90% correspondiente a diciembre pasado, los productos agropecuarios incrementaron a un ritmo de 0.14% y los energéticos lo hicieron en 0.83% a tasa mensual. 

En cambio, la inflación subyacente avanzó a menor velocidad, 0.62%, desde un alza previa de 0.80% vista en diciembre pasado; sin embargo, los precios de las mercancías se lazaron 0.99%, la mayor desde febrero de 2017, cuando el incremento fue de 1.11%. 

Ante una menor demanda, los precios de los servicios avanzaron 0.19% mensual en enero, desde un ritmo de 0.68% marcado en diciembre de 2021, cuando se viven las vacaciones decembrinas. 

Por su incidencia en el consumo de la población, el limón, la gasolina de bajo octanaje y los precios en las fondas, loncherías y tonterías mantienen su presión sobre la inflación general, con incrementos de 68.7%, 1.68% y 1.61%, respectivamente. 

En su análisis sobre la inflación general de enero, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco BASE estimó que el indicador se mantendrá encima de 6.0%, al menos durante el primer trimestre del año. 

Expuso que las presiones provienen principalmente del exterior ante las disrupciones en las cadenas de suministro, alzas en precios de energéticos y escasez de productos. 

“A nivel local, la gran entrada de remesas pudiera estar ocasionando un incremento del circulante y con eso provocando presiones inflacionarias”. 

Estimó que el Banco de México (Banxico) incrementará su tasa objetivo en 50 puntos base, desde el actual 5.5% en que se ubica la tasa de interés interbancaria.  

Siller prevé que la inflación empezará a ceder de manera significativa en el último trimestre del año, si el problema de disrupciones en la cadena de suministro empieza a resolverse y si la liquidez global empieza a disminuir.

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